por Fulgencio Sebastian
Dentro de la serie de retratos y entrevistas que el pintor Félix de la Concha (León, 1962) viene realizando en el marco de la Semana Negra ayer le tocó el turno al aclamado novelista Juan Madrid. De la Concha se enfrentó a su prosa, no sin dificultades. Es difícil manejar a este hombre en una entrevista, sin que este trace su propio camino. Más cuando uno está distraído con los pinceles. Nos recordaba Juan Madrid lo que decía Machín "yo no puedo comprender cómo se pueden querer dos mujeres a la vez, y no estar loco". Por ello dejó la pintura en su adolescencia para volcar todas sus energías en escribir.
Comenzó la entrevista con la mención a la relación autor-lector entendiendo ésta como una «relación mágica» que Madrid denominó como «el canto de Sherezade». Habló de las motivaciones que le impulsan escribir intentando abordar lo que no se cuenta, a «tapar los agujeros de la realidad». Uno de los huecos que más le costó llenar fue el relativo a los ricos. «Nadie conoce a los ricos», afirmó Madrid. Un repaso por su vida: de chico de la calle,conocedor de los bajos fondos (cobrador de deudas dudosas, detective sin licencia), a escritor. De vivir inmerso en esa realidad a documentarse en ella. En el personaje de Toni Romano hace un repaso por esa transición española de la que nada se cuenta y de la que nada se sabe. De ahí a redactor en Cambio 16. En una entrevista a Emilio Botín, le saca de su engaño, no sabemos como son los ricos. "Desengañate chico, los ricos somos muy pocos".
De la Concha estableció un paralelismo entre el ansia por el dinero que tienen los ricos y el ansia de fama de escritores y pintores. «Es el peor ejemplo que has puesto en tu vida», le corrigió el escritor. Juan Madrid no estaba cansado y aguantó estoicamente, sin cambiar de pose, una pregunta tras otra. "Pero estaría mejor con una cerveza". Apurando la caña, repasa la actualidad. Surgieron los años de Madrid como periodista, profesión que le permitió conocer lo peor de la condición humana, desde España a Argentina. Y la injusticia continúa en la actualidad. Madrid comparó el nazismo con los discursos de los actuales dirigentes políticos. «Se está produciendo un holocausto», alertó. «Al final Hitler ganó la guerra. Se está haciendo una política que lleva a morirse de hambre a dos tercios de la humanidad. A eso yo lo llamo fascismo, desprecio absoluto por el ser humano». Estamos frente a un nuevo fascismo. En los discursos actuales de nuestros dirigentes hay ese mismo desprecio por la gente. "No se consideran fascistas porque no llevan el mismo uniforme pero son conscientes de que lo que hacen está llevando a la miseria a millones de personas. Si, millones. Todo ello compatible con ser buenos cristianos y alabar la caridad a los pobres."
¿Cabe la poesía en esta realidad? «Parece que sí», comentó el Madrid, quien abomina de la metáfora: «la poesía acompaña a los dictadores».
Finalmente, declaró que sólo hay dos formas de escribir : estás con el sistema o estás en contra. En estos momentos hay que ser más radical.
¿Como definir a Juan Madrid? Comprometido, directo, sin metáforas. De dialéctica cortante, que separa la esencial de lo accesorio.
[Publicado originalmente en Mundo Obrero]